La palabra indolente es un adjetivo con el que se describe a alguien que tiene pereza o falta de voluntad para hacer algo. De igual manera, este adjetivo se suele emplear para referirse a todo lo que sea característico de personas así. En cierta forma podemos decir que alguien indolente es una persona perezosa, descuidada de sus cosas y de sí misma.
El término indolente describe así un estado o actitud muy similar a lo que ocurre con la abulia. En cuanto a su origen, la palabra indolente deriva del término indolens del latín que tiene diferentes significados. Por un lado se refiere a alguien que no experimenta dolor, o bien puede referirse a la persona que no se conmueve y por último a alguien holgazán.
Teniendo en cuenta estos significados, no es de extrañar que se use el término indolente para describir a personas inexpresivas. Con esto nos referimos a alguien que no reacciona ante algo o bien se mantiene impasible. Sobre todo cuando se trata de una situación impresionable, inquietante o preocupante, se lo relaciona así con la insensibilidad.
Ya sea que esta palabra se emplee para describir a alguien insensible o perezoso, lo cierto es que en ambos casos tiene connotaciones negativas. Esto significa que calificar a alguien de esta forma por lo general es una forma de criticar sus actitudes. Es decir, la falta de reacción o accionar de alguien así está mal visto por la gente de su entorno.
En algunos casos ambos significados pueden fusionarse, sobre todo cuando son testigos de algún hecho reprochable. Si en un caso así la persona no se muestra afectada y tampoco decide hacer algo al respecto está siendo indolente en ambos sentidos. Pero aunque se suele emplear para describir actitudes específicas, la indolencia puede llegar a ser una cualidad de esa persona.
De esta manera, una persona indolente se caracteriza por su descuido, impuntualidad, negligencia y pereza. Adoptar una actitud indolente supone decidir no actuar, no sentir, no involucrarse en nada. Las personas indolentes suelen presentar un carácter insensible ante cosas que interesan o conmueven a otras personas.
Características y ejemplos
Tal como hemos señalado, una persona indolente se caracteriza por su pereza, su irresponsabilidad y negligencia. Por eso se lo puede calificar como apático, insensible ante todo tipo de conmoción y hasta perezoso. En materia de psicología se describe como indolente a la persona que no se conmueve ante el dolor ajeno en general.
Por eso podemos decir que la indolencia representa todo lo opuesto al apoyo, la empatía y la solidaridad. Lejos de unir a las personas entre sí, la indolencia hace que esta persona se aísle y excluya de los demás. Esto se debe en parte a su inactividad como a su insensibilidad ante el pesar de otros, por ejemplo.
Como ejemplos de uso podemos mencionar los siguientes: “A pesar de ver cómo se caía la señora, el joven pasó de largo con actitud indolente”. “Al vecino le empezaron a decir el indolente, lo que está todo el día sentado en la vereda sin hacer nada”. “Los presentes permanecieron indolentes mientras el jefe insultaba a uno de los empleados”.
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"Indolente". En: De Significados. Disponible en: https://designificados.com/indolente/ Consultado: 20 de abril de 2024.