Hecho Imponible: Qué Es y Cómo Afecta Tus Impuestos

Un hecho imponible supone una situación que se origina a partir del nacimiento de una obligación tributaria. Por otra parte, cabe mencionar que para cada tributo existe un presupuesto fijado por ley. A su vez, estos tributos nacen a partir de un hecho imponible que fue lo que provocó la ley que lo regula.

En definitiva, un hecho imponible obliga a una persona o bien a una empresa a pagar o presentar un tributo determinado. A la persona o empresa se le conoce en materia tributaria como obligado tributario. Por su parte, el tributo que deben pagar suele ser un impuesto o bien una tasa por algo concreto.

Sin embargo, cabe señalar que muchos hechos imponibles tienden a ser asimilados. Con esto nos referimos a que dicho hecho imponible puede llegar a originar dos tributos. Pero las leyes tributarias señalan que no se puede gravar o tributar dos impuestos por un mismo hecho imponible.

También existen casos donde un individuo no está obligado a pagar ni presentar algún impuesto, es decir, se encuentra exento. En muchos de estos casos no le corresponde pagar el impuesto, pero se recomienda que lo presente igualmente. Aunque cada situación es específica y depende de las leyes que los regulan de forma particular.

La mayoría de las veces, cuando alguna persona u organización se encuentra exenta de un impuesto es para ayudar a dicho sector. Aunque también puede darse esta situación en casos de comercio internacional para facilitar las transacciones. Pero tal como hemos mencionado, el hecho imponible y sus particularidades dependen de cada ley tributaria.

En definitiva, el hecho imponible puede definirse como el objeto básico en cualquier ley tributaria. De esta manera, el hecho imponible siempre se encuentra dentro de los primeros artículos de cada ley de este tipo. Es decir, se encuentran en el cuerpo principal de la ley y no en sus reglamentos o normativas accesorias.

Algunos ejemplos de hechos imponibles

Uno de los impuestos más conocidos es probablemente el del IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido). Así, en el impuesto del IVA, el hecho imponible surge con la entrega de algún bien o la prestación de un servicio. En el caso del impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, el hecho imponible se origina cuando la persona obtiene ingresos, lo mismo sucede con las Sociedades.

Por su parte, con el impuesto sobre Bienes Inmuebles, la obligación tributaria nace con la propiedad de una vivienda o local comercial. Cada municipio suele cobrar impuestos y tasas por el uso de servicios o espacios públicos. También existe un impuesto sobre Donaciones y Sucesiones cuyo hecho imponible se da al adquirir una donación, herencia o legado.

De acuerdo a la Ley General Tributaria, un hecho imponible se trata del presupuesto que se fija por ley para configurar cada tributo. Además, la realización del tributo se basa en el nacimiento de la obligación tributaria que lo determina. Esto significa que el hecho imponible es el hecho que provoca la obligación de pagar un impuesto determinado.