El término oneroso puede entenderse como un adjetivo para describir algo que resulta caro, molesto o pesado. Pero también se trata de un concepto empleado en materia de derecho que describe prestaciones recíprocas. Esta palabra deriva del término onerosus del latín que, a su vez, proviene de onus y significa carga.
Cuando usamos esta palabra a modo de adjetivo lo hacemos para describir el gasto o molestia que supone alguna cosa. Por ejemplo: “No voy a poder hacer el viaje por Europa con mis amigas porque me resulta oneroso”. O bien: “Trabajar doce horas con este calor en esa fábrica es realmente oneroso”.
Por lo general, este adjetivo se suele emplear para describir bienes o propiedades que tienen un precio realmente elevado. Un ejemplo de este uso sería: “La casa que se querían comprar mis padres resultó ser onerosa, el precio era una locura”. Pero como ya mencionamos, el mismo adjetivo también puede describir algo incómodo, molesto o pesado.
Para el derecho, en cambio, el significado de esta palabra es completamente diferente al del adjetivo común. En este sentido, según el derecho el concepto de oneroso señala un tipo de contrato donde las partes cuentan con beneficios y obligaciones recíprocas. Un ejemplo de esto ocurre cuando alguien compra un electrodoméstico, paga el precio del mismo para recibir el producto.
De esta manera, un acto jurídico oneroso es lo opuesto a uno que resulta gratuito. Como ejemplo de acto jurídico gratuito podemos mencionar una donación donde alguien otorga algo sin esperar reciprocidad. Allí radica la diferencia, en la reciprocidad y los beneficios que obtienen las partes de este acto.
También se emplea este término para referirse a un título jurídico que describe este tipo de acto. Es decir, el acto jurídico en el cual dos partes intercambian contraprestaciones de manera equivalente y recíproca. Con un título oneroso, las partes cuentan con compromisos y derechos similares.
El concepto jurídico de oneroso
Siguiendo con la idea del título oneroso cabe mencionar que si una de las partes no cumplen con sus obligaciones deberá compensar a la contraparte. Por lo general en estos casos se estipula algún tipo de indemnización en caso de faltas. Un ejemplo de título oneroso sería un contrato de trabajo ya que el trabajador se compromete a realizar una labor a cambio de una remuneración por parte del empleador.
Dijimos además que si una de las partes no cumple con sus obligaciones la otra debe retribuir la falta. Siguiendo con el ejemplo laboral, cuando el empleador rescinde el contrato del trabajador debe pagarle una indemnización. Otro ejemplo de título oneroso ocurre con los contratos de alquiler e incluso el acuerdo para conformar una sociedad.
Por otra parte, podemos hablar de contrato oneroso cuando dos o más partes establecen una obligación o prestación recíproca. En este sentido, los contratos onerosos pueden realizarse tanto en el ámbito civil como en el mercantil. Pero en este último caso suele ser una de sus características principales debido al carácter recíproco de la transacción.
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"Oneroso". En: De Significados. Disponible en: https://designificados.com/oneroso/ Consultado: 26 de abril de 2024.