El Refrán «Agua Que No Has de Beber, Déjala Correr»: Sabiduría Para Evitar Problemas Innecesarios

El refrán “Agua que no has de beber, déjala correr” hace referencia a que no hay que involucrarse en cosas que no nos interesan o incumben. En este sentido, cuando una situación no nos afecta directamente lo más inteligente es dejarlo pasar. Se trata de un refrán que aconseja con sabiduría que nos ahorremos problemas innecesarios.

En cierta forma, este refrán alude al hecho de andar metiéndose en asuntos ajenos. Se trata de un refrán popular de origen español que se extendió y usa también en América Latina. Así, este refrán advierte y aconseja a las personas que eviten involucrarse en cuestiones de terceros.

Al evitar estas situaciones nos ahorramos problemas e incluso empeorar el asunto para los que sí están involucrados. Por eso, cada vez que una persona se enfrenta a una situación de este estilo lo mejor es dejarlo estar. Lo ideal es que esos conflictos o situaciones sean afrontados por los involucrados y ellos encuentren una solución.

Por lo general, cuando una persona se entromete en un asunto que no le corresponde puede terminar mal parado o en problemas. Esto no solo lo afecta por meterse donde no le convenía, sino que también puede molestar a los involucrados. De ahí que el refrán aconseja dejar pasar esos asuntos que no nos competen o son nuestro problema.

A pesar de la popularidad de este refrán, cabe mencionar que cuenta con ciertas variantes. Así, una de esas variantes reza: “Agua que no es de beber, déjala correr” o bien “No debe moverse el agua cuando no se ha de beber”. Otro refrán que aconseja algo similar a este es: “Zapatero a tus zapatos”.

La idea de este refrán hace referencia a que no hay que desperdiciar tiempo en algo que no nos afecta personalmente. Si algo no nos incumbe, lo más inteligente que podemos hacer es no meternos y dejar que siga su curso natural. Lo mismo se puede aplicar para todo aquello que no deseamos ni nos interesa realmente.

Curiosidades y simbolismos

Como todo refrán, este no debe interpretarse de forma literal ya que se trata de una metáfora. En este caso, se habla del agua con la idea de que si alguien no la bebe la deje para quien la necesita. Lo mismo aplica para cualquier otra situación, si no nos afecta o interesa lo mejor es no involucrarse.

Algunas personas son curiosas y entrometidas por naturaleza y tienen la costumbre de meterse donde no le llaman, como se suele decir. En ocasiones lo hacen por curiosidad, quizás no tienen malas intenciones o se trata de un asunto que afecta a un ser querido. Pero también puede suceder que se involucran en asuntos ajenos para sembrar discordia y empeorar las cosas.

Y es sobre esto que advierte el refrán, ya que cualquiera sea el motivo o intención, no se trata de algo que les importe. Por más curiosidad o cariño que le tengan a alguno de los afectados, lo mejor es evitar posibles problemas. También puede ocurrir que si se involucran queden mal parados cuando los demás solucionen el asunto por su cuenta.