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Desobediencia Civil: ¿Cómo Cambiar el Mundo?

Descubre qué es la desobediencia civil, cómo funciona y cuándo es legítima. Aprende cuándo es una forma de lucha válida y cuándo puede ser contraproducente.

Lo más destacado de este artículo

  • La desobediencia civil es un desacuerdo político que busca cambiar el orden social a través del incumplimiento de normas.
  • La desobediencia civil se caracteriza por ser un acto público, consciente, no violento y que busca la modificación de una ley.
  • La desobediencia civil es legítima cuando no existen vías legales para expresar el descontento y hay posibilidad de éxito en la demanda.
  • La desobediencia civil busca generar apoyo público y presionar para el cambio de la norma.

La desobediencia hace referencia a un tipo de desacuerdo político que se caracteriza por incumplir alguna norma. Las normas a incumplir en caso de desobediencia civil pueden ser una norma jurídica o cualquier tipo de norma social. Por lo general, estas normas son de cumplimiento obligatorio para todos los ciudadanos, incumplirlas conlleva una sanción.

Cuando una persona o grupo de personas incurren en desobediencia civil están buscando cambiar el orden político o social. Por lo general, este comportamiento se debe a que alguna norma o disposición política afecta a sus libertades. Así, la desobediencia civil decide incumplir las obligaciones éticas o legales que deberían respetar los ciudadanos.

Entonces, como desobediencia civil se contemplan todos aquellos actos o procesos que se oponen públicamente a una ley política. Resulta necesario que quienes desobedecen las normas sean conscientes de las mismas y de lo que están haciendo. Esto quiere decir que quien opta por la desobediencia civil reconoce la ilegalidad de sus acciones.

La desobediencia civil se refiere a aquella acción que se opone a una norma.

Podría decirse que la desobediencia civil es la forma en que deciden expresarse algunas personas cuando ocurre algo injusto. Están respondiendo y decidiendo expresar su descontento sobre esas disposiciones en lugar de acatar las reglas y conformarse. Al desobedecer esas normas o leyes, los desobedientes civiles esperan lograr que la misma se cambie.

A pesar de lo que hemos señalado sobre las acciones de desobediencia civil, cabe mencionar que no es lo mismo que un delito. Aunque las personas que se oponen a una ley deciden desobedecer, no están cometiendo un crimen. La desobediencia civil se expresa mediante actos públicos que critiquen esa norma injusta y pedir que la cambien.

En ese carácter público reside la diferencia entre la desobediencia civil y un crimen o delito. Realizar este acto de forma pública y visible les permite llamar la atención y conseguir el apoyo de la opinión pública. Mientras más resuene esta desobediencia y lo que critica, más probabilidades hay de que se pueda llegar a cambiar la norma.

Características de la desobediencia civil

Según el filósofo estadounidense John Rawls, la desobediencia civil es un acto público consciente, político y no violento. Esta acción de desobediencia civil se opone a una ley y busca que se la cambie o reconsidere. Algunos pensadores han debatido acerca de la legitimidad de los actos de desobediencia civil

Con respecto a esto se han señalado dos requisitos que deben cumplir los actos de desobediencia civil. En primer lugar no debe haber una vía legal que permita eludir esa responsabilidad normativa. De existir cualquier vía legal que se pueda aplicar en la práctica se termina deslegitimando la desobediencia civil.

Por otra parte, el otro requisito señala que debe existir una posibilidad para que esa demanda tenga éxito. Con esto se refiere a que si hay alguna chance de conseguir su cometido, cualquier sanción por ese acto de desobediencia vale la pena. Siempre y cuando esa sanción o castigo no sea la pena de muerte porque esto deslegitimaría la desobediencia.

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"Desobediencia Civil: ¿Cómo Cambiar el Mundo?". En: De Significados. Disponible en: https://designificados.com/desobediencia-civil/ Consultado: 29 de octubre de 2024.