Cabeza de Ratón o Cola de León: ¿Qué Camino te Lleva al Éxito?

La frase “Más vale ser cabeza de ratón que cola de león” es un refrán usado por lo general para referirse al trabajo. En este sentido, este refrán hace referencia al estancamiento laboral que experimenta una persona. Con esto menciona el hecho de no poder avanzar o sobresalir porque suele haber alguien más que lo bloquea o retiene.

De esta manera, esta frase señala el no conseguir un mejor puesto porque hay otra persona que lo opaca. Por lo general, esa otra persona puede desalentar su crecimiento laboral o sus ganas de mejorar en el trabajo. Cuando ocurre esto, la persona estancada decide buscar otro trabajo donde sí pueda progresar.

Estas situaciones no necesariamente implican que quien no avanza es incapaz o no se esfuerza lo suficiente. Por el contrario, sucede que esa otra persona que le lleva la delantera es más hábil o astuto. En esos casos, la otra persona puede ser más habilidosa, tener mayor antigüedad en el trabajo o estar mejor conectada.

Otra forma de interpretar esta frase también usa animales para ejemplificar esta sensación y el papel que juega una persona en un contexto u otro. Esa otra frase en cuestión es: pez grande en estanque chico. Por lo general, estas frases hacen referencia a la importancia de uno frente a la competencia laboral.

En este sentido, si lo trasladamos al ámbito laboral podemos interpretar la frase de la siguiente manera: Si prefieren liderar en una empresa pequeña o ser uno más del montón en una empresa más grande. Aunque la misma analogía sirve para cualquier tipo de trabajo o actividad que supone cierta competencia.

Este refrán es de origen español y hace referencia a la autoridad o importancia que tiene alguien en un grupo pequeño. De ahí lo de cabeza de ratón, mientras que la cola de león está al final de todo. Así, esta frase menciona la preferencia de ser primero en una empresa pequeña que el último en una grande.

Aspectos a tener en cuenta

Muchas personas se desalientan cuando no pueden avanzar en su trabajo o sienten que sus talentos se desperdician en una empresa grande. En estos casos se sienten estancados o hay tanta competencia que nunca llegan a sobresalir entre los demás. Por eso se plantean buscar otras opciones u oportunidades que los desafíen y valoren sus habilidades.

Es en ese momento donde la persona se plantea si prefiere ser cabeza de ratón o cola de león. Aquí va a considerar sus objetivos, sus aspiraciones y lo que quiere conseguir para su carrera y su futuro. Aunque una empresa pequeña tiene menos prestigio o sea menos conocida puede ser la oportunidad para demostrar sus capacidades y avanzar laboralmente.

Entonces, este refrán se suele aplicar en situaciones donde a uno no se lo aprecia, se siente estancado o existe mucha competencia. También puede tener que ver con no querer seguir siendo un empleado más a cargo de jefes desconsiderados. Esta situación suele llevar a muchas personas a querer emprender por su cuenta y crear sus propios negocios.