Democracia Representativa: Elige a Tus Representantes, el Poder del Pueblo en Manos de Sus Elegidos

El concepto de democracia representativa es un régimen político donde el pueblo elige a sus representantes. De esta manera, el pueblo de un país ejerce su soberanía eligiendo a los representantes del Estado por votación. También se conoce a este tipo de régimen político como democracia indirecta ya que se basa en la representación política.

En esencia, la democracia representativa se basa en la elección de funcionarios y representantes por parte de los ciudadanos. El poder de un Estado democrático le pertenece a sus ciudadanos, pero delegan las decisiones políticas en estos representantes. Esto se hace posible a través del sistema electoral y el voto de los ciudadanos.

Este sistema político es el que se emplea en la mayoría de las democracias en la actualidad. Así, cada democracia cuenta con una serie de sistemas de representación para elegir a los representantes del poder ejecutivo y legislativo. Todas aquellas personas que ocupan cargos públicos son representantes de los ciudadanos.

Así, podemos decir que la democracia representativa es la elección de representantes del poder político por parte de la voluntad popular. A pesar de sus características y de ser el modelo más empleado en materia de política, cuenta con ciertas limitaciones. En este sentido, las dificultades y limitaciones de este sistema político se deben al mismo modelo.

Debido a estas limitaciones, algunos especialistas en materia de política sugieren que la democracia directa sería mejor. La democracia directa era el modelo político que se empleaba en la Antigua Grecia. De igual manera, y a pesar de las críticas hacia la democracia representativa, sigue siendo el elegido por casi todas las naciones democráticas.

Cabe señalar que la democracia representativa se basa en el modelo que caracterizaba a las asambleas romanas. En este sentido, a diferencia de la democracia directa, el antecedente de la democracia representativa se encuentra en la República Romana. El modelo actual se basa en el sistema representativo que instalaron en Gran Bretaña en el siglo XIII.

Historia y características

Después del sistema representativo de voceros que instalaron en Gran Bretaña, en el siglo XVII se institucionalizó la democracia liberal. Esto se hizo posible con la creación del Parlamento Británico que luego permitió la Declaración de derechos en 1689. Un siglo después, Francia y Estados Unidos siguieron sus pasos con nuevos sistemas políticos democráticos.

Durante la Revolución Industrial, las naciones afectadas por ella replicaron este método de gobierno. En esencia, la idea de la democracia representativa se basa en delegar el poder soberano del pueblo en funcionarios elegidos por votación. Así, cada cierto período de tiempo se celebran elecciones libres y públicas para que los ciudadanos elijan a sus representantes en el poder.

Los funcionarios elegidos por votación cuentan con cargos específicos que cuentan con su propia autoridad y responsabilidades. Así, es deber de estos funcionarios el tomar decisiones políticas y legislativas que afectan la vida de los ciudadanos. El objetivo de esta democracia consiste en garantizar a la ciudadanía una gestión política eficiente y pluralista.