Escribir una Monografía: Estructura, Tipos y Ejemplos

Una monografía es un documento donde se explica o expone algún tema en particular de forma detallada. De esta manera, el tema de la monografía puede abordarse desde una o más perspectivas, consultando diferentes fuentes y empleando material de apoyo. En este sentido, se emplea toda la información necesaria para abordar el tema de la monografía.

La palabra monografía deriva de los términos mono y graphos del latín que significan uno y escritura, respectivamente. Las monografías se emplean principalmente en el ámbito académico y en otros ambientes laborales. Esto se debe a que este tipo de documento supone una importante investigación pero no precisa de un lenguaje especializado o técnico.

En cuanto a la extensión de una monografía, esta depende por lo general del tema, el enfoque o el formato elegido. Esto hace de las monografías un formato bien versátil para exponer los hallazgos de una investigación. A pesar de ello, las monografías cuentan con una serie de características y una estructura determinada.

Así, una monografía debe ser un texto escrito cohesivo y coherente donde se desarrolla un tema que se identifica con claridad. Además, este tema debe tratarse desde una perspectiva reconocible y aportar información útil y necesaria. A su vez, la monografía debe tener una estructura sistemática donde se desarrolle de forma extensa y exhaustiva dicho tema.

Por otra parte, la monografía debe contar con referencias bibliográficas o similares que puedan verificarse de ser necesario. Las referencias son necesarias para validar la información y los datos que presenta la monografía. Estas referencias le otorgan mayor veracidad a la monografía ya que no es un texto imaginativo.

Ya lo mencionamos antes, pero la extensión de una monografía varía según cada caso. Lo ideal es que se extienda lo suficiente hasta agotar el tema que aborda desde todos los puntos posibles. También se aconseja que el tema se aborde desde una perspectiva expositiva, objetiva y evitando las subjetividades.

Tipos de monografías

Existen diferentes tipos de monografía según el propósito central de este texto. Así podemos mencionar las monografías de análisis experiencial, las de compilación y las de investigación. Las monografías de análisis experiencial abordan una experiencia no científica de forma expositiva.

Lo importante de este tipo de monografías es que el tema pueda verificarse de forma práctica. El uso de este tipo de monografía suele ser acotado y especializado y por lo general no forman parte de una investigación. Una monografía de compilación busca reunir los aportes y textos más significativos que existen sobre un tema.

De esta manera, este tipo de monografía compila o sintetiza información sobre ese tema y puede añadir algunos datos nuevos. Por último, la monografía de investigación se emplea principalmente en las ciencias sobre algún experimento o experiencia científica. Por lo general, estos experimentos deben encuadrarse en cierto contexto teórico y justificarse con bibliografía acorde y previa sobre ese tema.

Vale mencionar brevemente que las monografías cuentan con una estructura de las siguientes partes: Portada con el título, autoría y demás datos iniciales; dedicatoria y agradecimientos; epígrafes; introducción; desarrollo; conclusiones; bibliografía; anexos.