Meta: Origen, Usos y Relación con tus Sueños

La palabra meta se refiere al lugar o el punto en el que termina una carrera. También se le llama meta al fin hacia el cual se dirigen las acciones o los deseos de alguien. En este sentido, la meta es un sinónimo de objetivo o propósito, aquello a lo que aspira una persona.

Por lo general, para alcanzar una meta se deben realizar una serie de acciones que lo conduzcan a lograr eso. Aunque también podemos hablar de metas como etapas de un proceso más grande para hacer o lograr algo. Así hablamos de metas como las etapas en la elaboración de un producto, al cumplir un objetivo, obtener conocimientos, etc.

Esta palabra deriva de un prefijo griego que se refería a un tiempo posterior, a futuro o que se encuentra más allá. Por ello solemos utilizar esta palabra para señalar un fin, el objetivo que perseguimos y las acciones que debemos realizar para lograrlo. Las metas también pueden verse como los deseos, pensamientos o sueños de una persona.

Además de estos significados, la palabra meta también puede significar otras cosas. Es decir, con meta no solo entendemos un logro, lugar o propósito personal. Aunque estos son los significados más comunes y utilizados de esta palabra también se la utiliza en determinados ámbitos. Por ejemplo, este término se suele usar en los deportes para marcar el lugar donde termina una carrera.

De esta manera, la meta en materia de deportes señala hasta dónde deben llegar los participantes de una carrera. Generalmente, la meta en una carrera se encuentra marcada por una bandera o alguna otra señalización. Y junto a este término, también se le suele llamar guardameta a la persona que se encuentra delimitando ese lugar.

Y con esta palabra también se suele identificar aquellas cosas que son autorreferenciales. Por ejemplo, hablamos de metalingüístico cuando una palabra, discurso o texto se refiere al propio lenguaje. Este concepto se aplica a otras disciplinas siempre que la cosa en cuestión se refiera a sí misma o aspectos de ella.

Aspectos y características

Retomando las metas como objetivos o propósitos, cabe señalar que una meta debería ser alcanzable y/o realista. Si la meta no es realista lo más probable es que la persona nunca pueda alcanzarla y sea una ilusión. En este sentido, las metas también deben ser observables o materiales, que tengan un inicio y un final.

Con respecto a la duración, si bien se contempla un período de tiempo para lograr esa meta, el mismo es variable. Además su logro depende de una serie de factores como lo son el tipo de meta, su dificultad, el empeño de la persona y otros factores externos y casuales. Lo ideal es determinar un tiempo específico para alcanzar esa meta sino se trata de un sueño platónico.

Aunque generalmente se toman los conceptos de meta y objetivo como sinónimos cuentan con ciertas diferencias. Para alcanzar una meta nos proponemos una serie de propósitos que nos ayuden a alcanzarla en cierto plazo de tiempo. Los objetivos suelen ser más extensos y se dividen en objetivos específicos y generales.