Mentefacto: Organiza Ideas con Esta Herramienta Gráfica

La palabra mentefacto designa una herramienta gráfica que se utiliza para resumir temas específicos. En este sentido, podemos emplear un mentefacto para compartir conocimientos o conocer sobre un tema. Otra forma de entender lo que es un mentefacto podría ser que se trata de un esquema conceptual que ordena diferentes ideas.

Esta palabra está compuesta por los términos mente y facto, por lo que el concepto es auto explicativo en ese sentido. Es decir, lo podemos entender como que se trata de una traducción fáctica del pensamiento humano. Aunque este concepto le añade el hecho de que esa traducción del pensamiento se realiza de forma gráfica con un esquema.

Teniendo esto en cuenta, el mentefacto como una herramienta gráfica se parece a otras que tienen propósitos similares. Nos referimos a cuadros sinópticos, ideogramas o mapas conceptuales que sirven para graficar ideas o conceptos. Sin embargo, cada una de estas herramientas gráficas tiene su estructura y particularidades que las diferencian.

Así, el mentefacto cuenta con una serie de elementos que deben contemplarse a la hora de hacer uno de estos gráficos. En primer lugar, en la parte central se ubica el título o tema general que se abordará. Por encima se explica de qué trata este tema, las ideas que lo caracterizan, una descripción del mismo.

Hacia la derecha de la parte central se relegan todos aquellos temas que se consideran excluidos o al margen. Por lo general se incluye un signo desigual que permite identificar la falta de relación con el tema en sí. Esto permite que un mentefacto diferencie claramente en qué consiste y en qué no el tema que trata.

Y por último, en la parte izquierda del centro se mencionan las distintas causas determinantes sobre el tema principal. De esta manera, el mentefacto permite abordar los diferentes aspectos de un tema de forma clara y ordenada. Por ello, este gráfico resulta de gran utilidad para explicar cualquier tema que nos interese analizar, estudiar o exponer.

Aspectos y usos

A raíz de lo que hemos mencionado acerca de esta herramienta gráfica podemos decir que es ideal para visualizar ideas. Además, si necesitamos exponer sobre algo es un excelente recurso para ordenar los distintos contenidos. Esto vuelve al mentefacto un soporte visual y material que le sirve tanto al que expone el tema como a quien lo escucha.

Si lo pensamos como una herramienta didáctica, podemos decir que el mentefacto es de gran utilidad para fortalecer el pensamiento argumental. Por ello no es de extrañar que se adoptara la idea de mentefacto argumental dentro del ambiente académico. Aunque cabe mencionar que existen distintos tipos de mentefactos (conceptuales, nocionales o proposicionales).

Además de referirse a esta herramienta gráfica, la palabra mentefacto también señala una capacidad intelectual. Nos referimos a la habilidad para examinar e interpretar conceptos para poder representarlos de forma gráfica y comprensible. Así, este concepto abarca tanto la operación mental como el gráfico resultante para poder representar estas ideas.