Descubre los Sofismas: Argumentos Falsos que te Engañan

La palabra sofisma se refiere a un argumento capcioso o falso que busca pasar como verdadero. Con esta clase de argumento se intenta hacer pasar algo falso por verdadero, es un razonamiento falso que busca engañar. Sin embargo, cuando no se busca engañar, este argumento o razonamiento falso se denomina paralogismo.

Otro de los objetivos que persigue alguien al formular un sofisma se relaciona con hacer que el adversario se equivoque. Por otra parte, la palabra sofisma deriva de sofista, palabra de origen griego que se refiere a la sabiduría o alguien sabio. El concepto de sofisma se asocia principalmente con la lógica para referirse a un razonamiento que parece correcto pero no lo es.

Aunque también se llega a definir este concepto como un razonamiento erróneo o falso. En cierta forma, podemos llegar a considerar al sofisma como un silogismo viciado producto de una desviación lógica entre los argumentos y su conclusión. Es decir, cuando se exponen una serie de premisas falsas o verdaderas pero la conclusión no es adecuada.

Se lo considera viciado porque, la mayoría de las veces, este tipo de razonamiento tiene la intención de confundir al interlocutor. Aunque también puede responder a la finalidad del emisor a defender cierta idea o postura. De esta manera, lo más característico de un sofisma es que aparentemente suena correcto pero es erróneo lógicamente.

Además de ser razonamientos lógicos, los sofismas pertenecen al ámbito de la retórica y se utilizan de forma cotidiana. En este sentido podemos mencionar diferentes tipos de sofismas que encontramos en nuestra vida diaria. Así hablamos de sofisma de accidente cuando este argumento busca confundir lo accidental con aquello que es esencial.

Otro tipo es el sofisma ignorancia de la causa donde no se define la causa real de algo sino que se emplea otra causa. También se encuentra el sofisma ignorancia de la cuestión donde se ignora una proposición al hacer foco en otra cosa que no tiene que ver con el tema en cuestión.

Otros tipos y características

Por otra parte se encuentra el sofisma petición de principio donde se parte de un principio y se deducen conclusiones sin demostrarlo. Luego se encuentra el sofisma de círculo vicioso donde una proposición se prueba con otra y esta con la anterior.

A continuación se encuentra el sofisma de inducción o de falsa generalización donde se generaliza a un grupo las propiedades de unos individuos. Y luego se encuentra el sofisma de analogía donde se saca una conclusión a partir de ciertas semejanzas de forma conveniente.

Debido a sus características, resulta muy común que se asocie el concepto de sofisma con el de falacia. Sin embargo, cabe remarcar que el sofisma es una falacia intencional donde se busca engañar al otro con una inferencia errónea. Mientras que una falacia consiste en sacar una conclusión errada debido a partir de premisas falsas. Entonces, el sofisma se diferencia de la falacia en que no importa si las premisas son correctas o falsas, la conclusión es siempre errónea para confundir o engañar al otro.