Los aceros son aleaciones de hierro a las que se les agregan cantidades mínimas de carbono para que así, al templarlos, se transformen en un material muy resistente y elástico. Son elementos muy utilizados en la construcción de viviendas, automóviles, maquinarias e inclusive utensilios de uso diario.
La cantidad de carbono que se encuentra en la aleación que formarán los aceros es variable, pues puede ir del 0,03% al 1,075% de su peso. Esto le dará una mayor o menor dureza al momento de ser utilizado.
Aceros de acuerdo a su composición química
No aleados o al carbono
Son aquellos que, además del carbono (el cual contiene en mayor cantidad) contienen otros elementos aleantes en menores proporciones tales como el manganeso, el cromo, el vanadio, el níquel e inclusive el titanio.
Aleados
Son aquellos tipos de acero que contienen carbono y otro elemento de los mencionados anteriormente en las mismas proporciones.
Inoxidables
Este tipo de aceros contienen un porcentaje superior al 10% de cromo y un máximo que no supera el 1,2% de carbono.
De acuerdo a su calidad
No aleados de calidad
Tienen características distintivas en lo que concierne a su tenacidad, formabilidad e inclusive en lo que respecta al tamaño del grano.
No aleados especiales
Presentan una pureza mayor que los aceros de calidad, sobre todo en lo que tiene que ver con la cantidad de no metales incluidos en la fórmula. Presentan un gran valor en lo que respecta a la elasticidad y al temple. Son muy resistentes a los cambios de temperaturas y pueden utilizarse para realizar soldaduras.
Los aceros se pueden contraer, expandir o dilatar e inclusive fundir si son sometidos a diferentes niveles de temperatura.
Aleados de calidad
Presentan una buena reacción en lo que respecta al control del tamaño de su grano y a la formabilidad. Son aceros que se emplean en la construcción de aparatos a presión y cuadros de entibación para las minas, entre otros.
Aleados especiales
En este caso, se tiene el control de la composición química de la aleación para que sus propiedades sean mejoradas. Se suelen emplear para fabricar herramientas, rodamientos o construcción mecánica.
De acuerdo a su aplicación
Los aceros de acuerdo a la aplicación que se les de a los mismos los podemos dividir en:
Para la construcción
Presentan facilidades al momentos de ser soldados.
De uso general
Se venden en planchas para transformarlos luego. Suelen encontrarse en el mercado laminados.
Cementados
Se trata de un tipo de aceros que fueron sometidos a tratamientos químicos y por calor lo cual les da una dureza extra aunque con un impacto fuerte pueden quebrarse.
Para temple y revenido
Son aceros a los cuales se los somete a tratamientos térmicos con el fin de endurecerlos y aumentar su resistencia. Para realizar esta operación, el material es sometido al calor superando los límites y, posteriormente, se enfría de manera rápida en agua o aceite según sea necesario. Son aceros muy duros y resistentes que se emplean en la construcción.
Inoxidables o para usos especiales
Cuentan con una aleación de hierro que tiene un 10% de cromo entre sus componentes. Es muy resistente a la humedad y a la corrosión por lo que no se oxida y presenta una gran afinidad para con el oxigeno. Se emplea en la fabricación de todo tipo de elementos de uso diario o industrial.
Para herramientas de corte y mecanizado
Presentan una gran resistencia al desgaste y tienen una gran dureza por lo que son muy apreciados, sobre todo, en la industria de la construcción de edificios y autopartes.
Formato para citar
"Tipos de Aceros: Guía Completa de sus Clasificaciones". En: De Significados. Disponible en: https://designificados.com/tipos-aceros/ Consultado: 23 de noviembre de 2024.